El objetivo de esta actividad es, identificar parte de la ritualidad mortuaria del pueblo aymara, brindar un espacio para que cada integrante de la Comunidad Educativa recuerde a sus familiares fallecidos, comprender la pérdida de un ser querido como un proceso natural que requiere un trabajo de las emociones. y también reconocer otras visiones respecto al significado de la muerte.