Una poda de producción consiste en
sacar ramas que produjeron la temporada anterior otorgando espacio a las nuevas
ramas para su posterior floración junto con vigorizar el árbol. Esta práctica
se debe realizar en todos los frutales después de la cosecha; en esta ocasión,
se realizo en mangos de 30 años , guanabano y unos ejemplares de cítricos
(naranjos y limones) de 5 años.
El productor explico en terreno, a los alumnos;
su experiencia en poda abordando temáticas de herramientas a utilizar y de la
forma de realizar la poda.
Con esta poda se puede lograr una producción
de 80 kilos por temporada por árbol de mango y sin este manejo, puede disminuir
hasta en un 50% su producción y aún peor, disminuir el calibre del fruto pero,
la floración es de mayor cantidad que en un árbol podado.
A la hora de la venta es clave el calibre del
fruto para obtener una buena rentabilidad.